“ – pero lo hicimos.
- hicimos qué, Nina? … espera, tuviste una especie de lujurioso sueño húmedo…conmigo?
- Detente.
- Oh Dios mío?!'? Oh Dios mío! Síiii! tuviste fantasías conmigo!!!
- Cállate!
- Y… yo estuve bien?”
(Nina y Lily)
Acabamos mis amigos el especial de Darren Aronofsky con su última obra hasta el momento: ‘Black Swan’ (2010) que al fin y después de medio año ha llegado a las salas de Cine aquí en Cochabamba, estrenada con honores en Venecia y aclamada por la crítica y él público. La película ya tiene ganados muchos premios y opta en importantes categorías en los próximos Oscar: está nominada a mejor película, mejor director y mejor actriz para Natalie Portman entre otras; luego de que concluya su recorrido comercial Darren filmará la secuela de ‘Wolverine’ con Hugh Jackman, un proyecto que sorprendió a muchos dado que no es su terreno pero nosotros, sus fieles seguidores, le desearemos lo mejor.
‘El Cisne Negro’ es la obra que debe estrenar una compañía teatral de Nueva York basado en la ópera ballett de Pyotr Tchaikovsky, en ella existe la tragedia de una princesa convertida en un cisne blanco, para recuperar su amor debe comprender todo lo que no pudo asimilar antes y entender también sus lados oscuros, los poco bonitos, debe (figurativamente hablando) convertirse en un cisne negro. En la compañía asignan esta labor a Nina (Natalie Portman) una talentosa bailarina cuya capacidad no destaca debido a su caracter frágil, su voz suave y su comportamiento sencillo; el director de la compañía (un correcto Vincent Cassel) utilizará técnicas poco éticas como la seducción y la presión para que explote su talento, para que cruce sus propias barreras, para que pueda interpretar tanto al cisne blanco como al cisne negro como a la cisne reina! Y qué hace Nina?
‘Black Swan’ es la metamorfosis kafkiana de Nina, de cómo vive la vida de su madre sobreprotectora, de cómo debe cargar con el peso de una carrera exigente y poco natural, de cómo le vemos aceptar el rol y conocerse recién a sí misma y sus lìmites. En esta transformación Nina toca algo que no debío tocar porque se quiebra, y es algo que no se quiebra como una pieza de cerámica y punto, no, se quiebra su razón. Empieza a ver imágenes, enloquece, alucina pero también decide, decide desvincularse de su lazo maternal, de la sombra de su antecesora, de las indicaciones mecánicas de su director. Su ‘ego’ es destruído sistemáticamente por su ‘alter ego’ sacrificando su razonamiento. Intenta controlarse reprimiendo muchas cosas (como la escena de la cama) pero al final su deseo de cumplir con su cambio es más fuerte. Cuando pensamos que puede mantener las cosas firmes aparece en escena otra bailarina que arriesga su puesto: Lily (Mila Kunis) y ya no reprime sus emociones, piensa que Lily es un espejo de lo que su vida podría haber sido, se estresa y poco a poco se va liberando de sus ataduras. Esta evolución mis amigos asusta, nos deja perplejos frente a la expectativa, observamos con suspenso, queremos saber cómo seguirá.
Natalie y Darren pensaron en realizar este film hace 10 años, tanto los compromisos de cada uno como el afinamiento del guión recién se completaron el 2009. Natalie y Mila se sometieron a la rigurosa disciplina del ballet día y noche. Natalie bajó peligrosamente de peso llegando incluso a lesionarse y enfermarse en plena grabación. Darren realizó el trabajo en planos múltiples y poco abiertos, es más, la mayoría de los planos son cerrados y limitados: el dormitorio de Nina (que más parece el de una infante), la sala de ensayos, la discoteca y el escenario del baile. Utiliza la música incidental y la banda sonora de su siempre amigo Clint Mansell (quien realizó todas las bandas sonoras de Darren desde ‘Pi’). Asimismo se apoya en unos efectos especiales sutiles y efectivos, las alucinaciones y las metamorfosis son muy creíbles, es una excelente demostración de que con pocos recursos se puede sacar petróleo.
Finalmente toca hablar del legado, no dudamos en relacionarla con las obras que inspiraron su realización: ‘Perfect Blue’ y ‘Millennium Actress’, las dos películas animé de Satoshi Kon, ídolo de Darren (y ya viene su especial juju) donde toma prestado escenas y rasgos típicos de una chica presionada por el (cruel) mundo del espectáculo. Asimismo hay que reconocer la labor de Natalie, a su edad tiene una de las trayectorias más espectaculares y respetadas del cine occidental y su nominación debería coronarse con un premio más que merecido. Darren utiliza las técnicas que en ‘The Wrestler’ ya le resultaron exitosas y que hacen parecer a ‘Black Swan’ como la versión alucinante del luchador, es la labor de un gran director que no escatimó en entregarnos cine de suspenso, de fantasía y de horror; no esperan más! vayan a ver a la bailarina que se convierte …en el cisne negro.
p.d. Aquí van nuestras anteriores reseñas y los links de las películas de Darren Aronofsky: ‘Pi, fé en el caos’, ‘Requiem For a Dream’, ‘La fuente de la vida’, ‘The Wrestler’.
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