"Abran la puerta..."
- Puyi.
A sus 47 años Bernardo Betolucci tardó tres años de su vida en plasmar y llevar al cine EL ULTIMO EMPERADOR, convertido en clásico instantáneo y que le rinde una épica biografía a la China de transición, mediante la figura de Aisin Gioro Puyin, el último emperador de linaje manchuriano que fué coronado en China, y más precisamente en "La Ciudad Prohibida".
Ayer pude volver a ver el largometraje en ATB y pensé en escribir sobre la obra ahora en condiciones mínimas, debo decir que Bernardo se manda un trabajo espectacular, en lo artístico, lo musical, lo narrativo y cinematográfico! el film es una demostración de las dudas del hombre cuando se juntan en un solo contenido: el poder, la ambición, las responsabilidades, la historia y el destino, un destino que a Puyi sólo le ha utilizado para desgraciar a otros, para contemplar el cambio de los sucesos de la humanidad, para ver lo que el humano puede y no puede hacer con los recursos a su disposición.
Bella obra maestra sin duda.
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