"Alfredo: -Te contaré una historia. Sólo para ti, Toto. Sentémonos. Hubo una vez un rey que dio una fiesta. Las más hermosas princesas asistieron. Un soldado de la guardia real vio pasar a la hija de rey. Era la más adorable, e inmediatamente el soldado se enamoró. Pero, ¿qué era un simple soldado al lado de la hija de un rey? Un día el soldado se las arregló para verla y le dijo que ya no podía vivir sin ella. La princesa quedó tan impactada por la profundidad de sus sentimientos que le dijo: "Si puedes esperar por 100 días con sus noches bajo mi balcón yo seré tuya". Dicho esto, el soldado salió y esperó un día, dos... luego diez, veinte. Cada noche la princesa lo buscaba y allí estaba él, sin moverse. Siempre allí, lloviera o relampagueara. Las aves se posaban en su cabeza, las abejas lo aguijoneaban, pero él no se movía. Después de 90 noches, se veía seco y pálido. Brotaron lágrimas de sus ojos. No pudo detenerlas. No tuvo ni siquiera fuerzas para dormir. Y todo ese tiempo, la princesa lo observaba. Cuando la nonagésima novena noche llegó... el soldado se levantó, tomó su silla, y se marchó...
Toto: -¿Qué? ¿Justo al final?
Alfredo: -¡Justo al final, Toto! No me preguntes qué significa, no lo sé. Si logras descifrarlo, me lo dices."
El canal 21 emitió Cinema Paradiso, la ganadora del Oscar a mejor película extranjera de 1989 y también del Globo de Oro y también de Cannes! y ... de muchas otras cosas; Cinema Paradiso, estamos hablando de un clásico mis queridos amigos.
Toto ayuda al sacerdote de su tierra natal quien a su vez coadministra el Cine Paradiso, el único del pueblo. El viejo Alfredo es el encargado de montar los rollos en el cine y comienza una gran amistad con el niño, la tragedia hace que Toto se vuelva a corta edad el encargado de los montajes mientras ve pasar el tiempo, envejecer a Alfredo y a su querido pueblo; su misión es otorgarle a toda esa gente esparcimiento, diversión, cine, romances, dramas y alguna que otra cosa más (jeje), cuando de repente se enamora! de una chica hermosa, preciosa, bellísima. Alfredo le cuenta la historia del soldado y la princesa (arriba) y Toto comprende que él va cambiando, que las cosas que siente van cambiando para él pero el pueblo sigue siendo el mismo, su chica le acepta pero su felicidad será por poco tiempo, llegará la distancia y les separará.
La película de Tornatore es semibiográfica y a su vez es un legado real y común de los miles de pueblos y ciudades que han tenido al cine de su plaza como el centro de sus emociones, el lugar donde la comunidad deja sus vivencias y asume otras identidades, en ese sentido Cinema Paradiso siempre ha sido uno de los mayores homenajes de amor al cine mundial, el trabajo del viejo Alfredo y del joven Toto es la misma historia del cine antiguo y moderno, hay una gran variedad de espectadores y películas como almas vacías que se llenan con historias de afuera y con historias propias, y con todo aquello que el cine otorga.
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