domingo, marzo 28, 2010

Escenas Inolvidable: El gatobús en Totoro

Disculpen la demora, la verdad que me encuentro muy triste, mi gatito anda mal que me preocupa mucho.

Y a mi me encantan los gatitos, los animales más inteligentes sobre la tierra sin duda.


"Vamos, hay que reír, para así espantar a los fantasmas!", El padre a sus niñas.

En MI VECINO TOTORO (1988), el maestro Hayao Miyazaki diseña una historia hermosa sobre unos cuadros salidos del pincel más brillante de la animación, las niñas Satsuke y Mei deben acompañar a su padre a establecerse en el campo rural japonés de la década de los 50s y donde él vivirá junto con sus hijas mientras trabaja en la universidad y se preocupa de la madre enferma lejos del hogar, este terrible escenario que supone la ausencia de la madre es llenada por el cariño del padre y de los amigos día tras día mientras la situación incierta de la mamá se arregle, las niñas encontrarán en el bosque donde viven la presencia de un mounstruo amigable, quien a nombre forzado de Totoro (jeje) se convertirá en compañero de las chiquillas y pasarán el tiempo, tiempo que su padre en el trabajo y la madre hospitalizada no pueden darles.

Lamentablemente un incidente provoca el extravío de la mas pequeña de las niñas, Mei.

La hermana mayor, viendo perdida a su hermana llora y se aflige, en este momento Totoro acude a la ayuda y no vendrá solo, no es el único mountruo de este hermoso paisaje ya que trae a su amigo: un gato gigante que es capaz de transformarse en un bus y todo sonriente llevará a Satsuke a buscar a la extraviada, todo esto en una de las escenas más bellas del cine de animación. Cóomo podremos agradecerle los siguientes años y décadas al maestro Miyazaki por tan bellas obras? la verdad no sé.


1 comentario:

Katina dijo...

La película más bella que ha existido jamás!! Toda mi admiración para el gran maestro Miyazaki